Nuestro encuentro
Aquella tarde ya oscureciendo llegaste tú
Como la luz a la oscuridad aclarando mi oscuro corazón
Aquella distancia llana y larga la esperaba
Con ansias; con optimismo y con nervios
Que a la vez sentía mi mirada y mi acento era lo
¡Que mantenía tus ojos fijos en mí!
Tu sonrisa única e incomparable me tenia inmóvil
Un suspiro era lo poco que me salía.
De la realidad estuve huida al pensar que eso no seria
Soñaba con este momento día tras día…
Hasta que por fin confirme que los sueños
Casi siempre son realidades, el roce de tus labios
Quedo como fuego marcado en mi piel.
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